Un nuevo y excitante relato que me ha enviado una colaboradora que se hace llamar Hurrem. El relato es tan seductor como su nombre. Espero que lo disfrutéis.
Etiqueta: Mujeres
Una cena especial
"Buffffff resopló al levantarse y notar el roce del pijama en su piel... Esta noche va a ser intensa- pensó." Así empieza un nuevo relato que me envía una autora. Rouse Alamo es creadora del Las historias de Rouse, un blog que os aconsejo seguir.
La seducción se viste de rojo
Así era la lógica imperturbable de la seducción, madre de la tentación que provoco el pecado original de la humanidad.
La verdadera felicidad es la oportunidad
Segunda entrega de la historia de C.
"Dicen que los hechos tienen tantas versiones como protagonistas, yo soy de la opinión que además de la de los protagonistas, está la versión de quienes las narran."
Luna de agosto
Decidí dejarme llevar, para qué engañarme, me gustaba aquello, en el fondo lo esperaba, desde que recibí su llamada invitándome a la fiesta, tras casi tres meses sin vernos, y a pesar de lo formal de la invitación, el tono de su voz recalcó de una forma especial cuando se despidió con “Ya conoces la casa, así que no te perderás”.
Julia
A Julia le gustaban los domingos especialmente sus mañanas, algo poco frecuente entre las chicas de su edad, más dadas a dormir después salir toda la noche. No es que no le gustase salir, al fin y al cabo tenía 27 años.
Masquerade
Estas situaciones eran las que nos hacían perder la cabeza a Alba y a mí, no éramos de ese tipo de amantes de jueves en un motel de 8 a 10, jugábamos al límite, eso era lo que nos unía y nos ponía.
Las confidencias de Lourdes
Sonreí y me dirigí al cuarto de baño, no es que tuviese ninguna necesidad pero empezaba a sentir un poco de humedad en mis braguitas. Ya dentro del cuarto de baño me quede mirando al espejo y me dije “pero que puta estás hecha”.
Las nuevas bragas de Alba
Un nuevo encuentro con Alba, los dos ya completamente entregados a la lujuria y al vicio. El morbo de excitarnos delante de su marido nos lleva a situaciones límite.
Creo que no me he equivocado
Había llegado ese momento en que dos personas notan que se están tocando, el contacto se prolonga hasta que se hace permanente, y los dos esperan a ver quién es el primero en separarse, gesto que delatará que ha prolongado el roce más allá de lo casual.